Terapeuta manual, se podría decir que desde que nací.
Hacer masajes y maquillar a todo lo que pillaba era lo que más me gustaba. Desde que tengo uso de razón, sabía que algo así sería en lo que me convertiría.
Con 20 años dejé mi ciudad natal, Vitoria, para adentrarme en la gran Barcelona, recuerdo esa sensación de sentirme pequeña en aquel lugar tan enorme, el metro repleto de gente, aquellas calles inmensas, gente corriendo… y yo ahí afrontando miedos e inseguridades.
Me formé en Asesoría de Imagen Personal y con ello me di cuenta de que no era mi camino, necesitaba más que nunca el contacto físico con las personas. Por lo que comencé mis estudios en maquillaje y estética, sin haber terminado ya encontré mi primer trabajo. He pasado por diferentes lugares, aprendiendo de cada experiencia a saber dónde quería estar. Durante muchos años he sido feliz haciendo lo que creía que era mi vocación, pero siempre había un vacío, algo que sentía como bloqueo. Sabía que había algo que no estaba bien.
De repente empezó a molestarme la presión con la que vive la mujer, uñas perfectas, bien depilada, piel estupenda y maquillada, cuerpos sin celulitis y delgados… toda esta presión empezó a dolerme en el pecho y sentí la responsabilidad de no ser parte de ese mundo. La responsabilidad que tengo desde el lugar que estoy es la de haceros ver la belleza que ya lleváis dentro, esa belleza que sólo vemos desde la felicidad y tranquilidad, desde la calma, desde el descanso, desde el trabajo de autoestima, desde el amor propio…Así que hace unos años decidí soltar por completo el mundo de la estética y la belleza, enfocándome así a un mundo de terapias más holísticas, desde donde puedo ayudaros y guiaros mucho mejor.
Entender el cuerpo como un todo, entender que cada parte de nuestro organismo está unida. A comprender que esta disociación de todo tal y como la vivimos, nos lleva a enfermar.
Enfocar mi trabajo a la parte más emocional y de salud, es una de las cosas que más me han llenado y sé que estoy en el camino correcto.
Mis tratamientos van de sentir, van de un diálogo entre tu cuerpo y mis manos.
Y mi intuición, mi gran aliada.
Aún queda camino por recorrer y por descubrir, pero si de algo estoy segura es que es aquí donde debo estar.
Sigo en constante aprendizaje, me gusta rodearme de grandes maestras, que junto a sus técnicas, complementan y completan la mía propia.
Ahora mismo soy una experta Facialista y terapeuta manual, futura acupuntora y todo lo que vendrá.